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miércoles, 23 de marzo de 2016

Cumbres borrascosas

Emily Brontë

ISBN: 978-607-14-1749-7
303 Páginas
PaperBack

Escritora británica, Cumbres Borrascosas es su única novela; murió de tuberculosis.

Hace mucho leí Jane Eyre de Charlotte Brontë, e investigando descubrí que su hermana era, al igual que ella, una escritora. Se decìa entonces de Emily que era una escritora revelación de su época, que fue rechazada en su momento histórico ya que insertaba un cambio drástico en la manera de pensar de las personas en su entorno. Entonces me decidí leerla. Así que fuí a Polanco, porque su librería me quedaba cerca, y compré la primera edición que encontré de Cumbres Borrascosas: Además muchas amigas también me habían platicado que es un libro increíble y que después viera la película.

El libro habla de una historia de amor desarrollada en Cumbres Borrascosas, donde todos los participantes de este embrollo amoroso trasladan sus problemas, incertidumbres y complejos a otras personas, que de hecho parecieran ser ellos. No puedo dar muchos detalles si quiero evitar los spoilers, pero solo puedo decir que esta estructura que denominaron “Matrioshka” (sí, como las muñequitas que van una dentro de otra, dentro de otra) te deja con una sensación bastante peculiar. Es como si conocieras toda la historia, cada desenlace y aún así te aferraras a encontrar al nuevo, al mejor, algo diferente. Tener la esperanza de que algo cambiará dentro de la historia, únicamente para saber si no estamos determinados por situaciones ajenas a nosotros y que nos han podido afectar directamente durante toda nuestra vida.
Es una historia llena de rencores, enojos, cosas sin entender, como si un amor juvenil desastroso jamás madurara y encontrase la forma de echar raíces dentro de nuestra vida diaria. Y fantasmas de un amor que alguna vez existió. El dolor y el anhelo de tiempos mejores.

El texto me hizo sentir muchas cosas de formas completamente extrañas, como si todo el tiempo supiera que pasaría, y al mismo tiempo, con la incertidumbre de no entender qué está pensando cada persona. Me emocionó y conmovió.

PERO (Sí, en mayúsculas porque es un gran pero) tuve dos conflictos al entrar en contacto con este libro: El primero, conocí a Charlotte y de alguna -incorrecta- forma creí que su texto se parecería mucho, así que al empezar a leerlo y darme cuenta de que no era así, casi me decepcionó, pero mi vena necia no me permite dejar un libro sin leer, así que continué y ¡Oh, por Zeus!. La segunda: Tal vez la traducción y edición de esta editorial no son las mejores, ya que me hace sentir algo confundida y constantemente tenía la sensación de estar perdiendo de vista cosas importantes para la historia, y para poder apreciar de mejor manera la estructura de la narrativa. Tercero: el texto en sí te confunde sobremanera al inicio, ya que puede que no estés acostumbrado a la técnica de escritura que utiliza, pero cuando empiezas a descubrir el juego y empatizas con los personajes, es sumamente fácil insertarse en la historia.

En conclusión, es un libro maravilloso, doloroso y peculiar.
Lo recomiendo a quienes tienen (o creen tener) un amor destructivo, de esos que te destruyen hasta la médula, a quienes nunca han tenido un amor así, a quienes nunca quieren experimentarlo, a quienes  buscan, tienen, encuentran e intentan olvidar fantasmas de sus amores pasados, de personas que están tan dentro de nosotros que no quieren irse. A quienes tienen a alguien que no han dejado ir, por la razón que sea. A quienes aman los finales tristes, a quienes no esperan nada, a quienes lo esperan todo. A quienes se anticipan y a quienes no pueden dejar de sorprenderse. A quienes leen. A quienes no quieren leer más.

A todos.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

Jane Eyre

Charlotte Brontë

Un día en la preparatoria un chico me prestó dos de sus libros; uno de ellos era Jane Eyre. Estaba en un momento en mi vida en que había dejado de lado un poco la literatura y me había enfocado un poco más en la comunicación. Entonces aunque me lo prestó (así, un día, sin más ni más, y sin pedirme nada a cambio) no lo leí, sino hasta muchos años después. Para ser sincera: éste año. Aquello del préstamo fue hace más o menos... 7 años.
Es así como el libro pasó a ser uno más de mi estantería, a ser uno de los más amados que tengo. (Mich, espero un día poder devolvértelo, cuando me compre mi copia, claro)

Charlotte nos sumerge en una historia maravillosa, poderosa e increíble. Jane era una pequeña niña que es huérfana desde joven, pero vive con sus tíos. El tío la quiere muchísimo y la procura, pero la Tía y los primos... no tanto. Entonces después de un incidente bastante grave, mandan a Jane Eyre a un orfanato, donde descubre que es indomable; que tiene un carácter que no está hecho para doblegarse o ser moldeable; es así. Poco a poco dentro de ésta institución con el paso del tiempo va descubriendo su vocación: Ser maestra. Las cosas van sucediendo poco a poco, y gracias a ser maestra-niñera, conoce a una peculiar familia y un empleo digno; a una pequeña berrinchuda, consentida, materialista y amorosa, y la vida de Jane se va complicando. Te prometo que puedes verla allí, llena de tierra en el portal de una casa a penas en pie, puedes verla sonriendo debajo de un árbol mirando a la pequeña desastrosa que está jugando. Sientes el dolor por los poros, el amor en cada célula. Es cierto, se trata de un libro sumamente romántico, tal vez por eso me gusta tanto. Jane se dibuja como una mujer fuerte, valiente, con un alto sentido de la justicia y leal, pero sobre todo: fiel a sí misma. No la detiene nada; ni siquiera el amor que puede sentir en lo más profundo de su ser, busca todo el tiempo el lugar donde pertenece y poco a poco en circunstancias difíciles se va dando cuenta de lo mucho que le ayuda ser un poco más flexible sin dejar de ser ella; que todo lo que ha aprendido es una herramienta. Nos lleva por un sube y baja de emociones.

Jane me hizo sentir el corazón en la garganta, el amor, el odio a la injusticia, la rebeldía, la sorpresa, la necesidad de algo más, la sed, la ansia. Absolutamente todo lo que ella sentía, pude sentirlo también en mi; era una especie de telepatía.

La lectura de éste libro de pronto puede tornarse pesada, ya que no es algo escrito propiamente en nuestro lenguaje, las épocas son diferentes y se nota en el lenguaje que usan; sin embargo poco a poquito te va envolviendo y atrapando en la historia. Sinceramente es de mis favoritos:
Por mucho, uno de los mejores libros en mis manos.
Pues nos enseña entre muchas otras cosas, que si no tienes opción al sufrir, al menos haz que valga la pena. Que cada cosa que haces, sea por ti, sea ética. Que hay fuegos que jamás han de apagarse .
Jamás el calor de un deseo ha de extinguirse.


Recomiendo Jane Eyre a los soñadores, a los románticos, a los indecisos, a los rectos, a los indomables, a los tercos, a los preguntones, a los circulares, a los perdidos, a los encontrados, a los fríos, a los de corazón caliente, a los que buscan, a los que encuentran, a los tristes, a los felices, a quien busca una nueva historia. A quienes no creen en el amor. A quienes sí. 
A todos.